Ignacio Sbaraglia

Soy el que renunció a querer ser corredor de bolsa, a terminar el profesorado de matemática, a producir móviles para las mellizas griegas y a editar promociones televisivas que casi nadie veía. Soy el que está convencido de que un día se ganará la lotería gorda para dejar de tener que trabajar; para pasar a hacer lo que le gusta con la mayor libertad posible. Soy el que hace más de cinco años cree que trabajar en Tiempo Argentino tiene algo de eso pero con menos ceros en la cuenta bancaria. Soy Ignacio Sbaraglia y, parafraseando a Mariano Zamorano en la revista Crisis, me pueden encontrar en la Centenario Alta del Monumental. Ojalá que mi epitafio diga «campeón del mundo».