El Sindicato de Prensa de Buenos Aires aspira a completar una radiografía sobre la situación de la mujer y del colectivo LGBT en el gremio. Las preguntas también abarcan aspectos generales sobre las condiciones laborales del conjunto de los trabajadores.
Tal como anticipó Pormastiempo.com en su edición del miércoles, el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) lanzó la encuesta con la que aspira a realizar una radiografía sobre la situación laboral de las compañeras trabajadoras de prensa, aunque también indaga en cuestiones más generales que afectan al conjunto de los trabajadores. Otro objetivo es concretar un diagnóstico sobre la realidad del colectivo LGBT.
En diálogo con la agencia Telam, la secretaria de Género del sindicato, Ana Laura Tornaquindici, dijo ayer que «invitamos a todas las personas del gremio a participar, porque las cuestiones de género no son sólo de interés de las mujeres, son de interés social».
A través de un formulario (disponible en http://bit.ly/1RQrC4O) quienes trabajen en medios de comunicación con sede en la Ciudad de Buenos Aires pueden contestar las preguntas que «permitirán hacer un análisis de la realidad dentro de los medios para visibilizar las temáticas que más preocupan y diseñar estrategias de acción», señaló la dirigente, trabajadora del diario BAE.
El acoso sexual solapado, situaciones violentas, el ejercicio de un periodismo con enfoque de género, el lugar que ocupan las periodistas, la ausencia de guarderías o cupo para personas trans, las diferencias salariales entre varones y mujeres en un mismo cargo, y la extensión de las licencias maternas y paternas, son algunos de los temas que «más preocupan, de acuerdo a charlas que hemos tenido con compañeras», agregó Tornaquindici.
La encuesta se elaboró en base a una serie de charlas previas que se llevaron a cabo en el ámbito de la Secretaría de Géneros con trabajadoras de prensa y de las que surgieron los temas más importantes para consultar.
Además de la encuesta, el objetivo es abrir un debate dentro del gremio de prensa sobre las problemáticas que afectan a las mujeres. “La encuesta va a estar acompañada por charlas y reuniones en los lugares de trabajo de forma de que estos temas sean tratados en profundidad y por todos los trabajadores”, afirmó Tornaquindici.
En coincidencia, Carla Gaudensi, delegada gremial de Télam y que forma parte del equipo de la Secretaría de Género, consideró que «el cambio cultural involucra a toda la sociedad, por eso es importante que participen la mayor cantidad de colegas en la encuesta, porque eso nos permitirá tener un primer análisis para saber cómo estamos y a partir de allí saber qué acciones y propuestas vamos a hacer. Es un proceso participativo en el cual cada trabajador y trabajadora de prensa puede aportar».
Según señaló Telam, la iniciativa llega en un momento en el que Naciones Unidas está incentivando los liderazgos femeninos, que en el caso de los medios de comunicación sólo llegan al 27% en cargos directivos en la prensa mundial, según un estudio de 522 medios de 59 países -incluído Argentina- realizado en 2011 por la Fundación Internacional de Mujeres en los Medios (IWMF, en inglés).
Parte de la historia de las acciones encaradas para conseguir la igualdad y equidad de género en los medios de comunicación tiene incluso, este año, su serie televisiva en Amazon: Good Girls Revolt. Basada en el libro homónimo de Lynn Povich, publicado en 2012 por la editorial Public Affairs, la autora cuenta cómo ella y 45 compañeras, en 1970, denunciaron a la revista Newsweek por discriminación tanto en las contrataciones como en los puestos dentro de la publicación. “A principios de los años ’70, los editores de Newsweek decidieron que el movimiento feminista tenía que ser portada. Sin embargo, había un problema: no había mujeres para escribir el artículo”, contó Povich en su libro. La denuncia dio resultado y la periodista se convirtió en la primera mujer en acceder a un puesto directivo en la revista, en 1975.
En paralelo, mujeres periodistas de The Reader’s Digest, The New York Times, NBC o Associated Press, siguieron el mismo camino. «Cuarenta años más tarde, ya no existe una categoría como la de investigadora en Newsweek ni cualquier otro cargo segregado por sexo. Pero al igual que el movimiento de derechos civiles, el de las mujeres de nuestro tiempo no lo resolvió todo. Las jóvenes, por mucho que hayan destacado en sus estudios, siguen golpeando un techo de cristal en su lugar de trabajo que aunque no sea legal sí es cultural”, resaltó en su libro Povich.