Más de mil personas se reunieron en el local de Villa Crespo que el último sábado inauguró la agrupación. Los agresores, que dispararon balas de plomo, todavía no fueron identificados.
Más de mil personas se reunieron ayer para repudiar la agresión a una militante de Nuevo Encuentro que fue baleada ayer durante la inauguración de un local partidario en Villa Crespo. “Hay que terminar con el espiral de odio, de bronca, de estigmatización de la militancia porque eso genera una situación propicia para que personas fundamentalistas tomen esta actitud”, reclamó el legislador José Cruz Campagnoli. Además, una unidad básica de La Cámpora en Mar del Plata fue atacada y recibió cinco disparos.
Dirigentes y militantes políticos rechazaron ayer las agresiones que sufrieron Florencia y Daiana, quienes el sábado pasado recibieron un balazo en el brazo y uno en el hombro, respectivamente. El ataque se produjo durante la inauguración de un local de Nuevo Encuentro en el barrio de Villa Crespo y aún no hubo detenidos por el caso.
Martín Sabbatella, líder de Nuevo Encuentro se reunirá hoy al mediodía con el ministro porteño de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, y más tarde mantendrá un encuentro con Patricia Bullrich, ministra de Seguridad de la Nación. Los funcionarios nacionales se mantuvieron en un curioso silencio desde que se conocieron los hechos.
“Vamos a exigirle a los ministros que se esclarezcan los hechos y se encuentre a los responsables de la agresión. Necesitamos que el poder político dé una señal concluyente para investigar y que la Justicia actúe con una rapidez que hasta ahora no ha mostrado. Nos parece muy importante que el caso no quede impune. Hay un contexto político ‘habilitante’ para que un fundamentalistas con intenciones criminales”, explicó Campagnoli a este diario. “Cuando desde el gobierno hablan de ‘grasa militante’ o cuando la ministra de Seguridad pide sacar a los militantes a palazos de las manifestaciones no hacen más que fomentar la violencia”, rechazó Campagnoli, quien estaba realizando un discurso en el momento en que se produjeron los disparos.
“Uno de los objetivos de esta gente es meter miedo, la respuesta tiene que ser sin violencia, pero contundente”, agregó el legislador porteño.
Su compañera de bancada, Andrea Conde, se expresó en la misma línea. “Estos terribles hechos están generados por una parte de la sociedad que dice que nosotros somos los violentos y los autoritarios, y que luego son los mismos que fomentan estos actos que dañan nuestra democracia”, comentó.“La verdad que en épocas cercanas como cuando sucedió la crisis del campo o la Ley de Medios hemos tenido denuncias por ruidos molestos, gente que pasa por la puerta de un local y te putea. Llegaron a tiranos agua, pero plomo nunca. Es una situación muy preocupante”, explicó un dirigente a Por Más Tiempo.
“En medio de la tristeza, la preocupación y la alarma que esto genera, haber estado con tanta gente, con toda la dirigencia política del distrito, todo el kirchnerismo y los artistas populares, nos confirma que hemos aprendido que no vamos a permitir que estas cosas sucedan”, dijo Gabriela Cerruti.
Del acto de repudio de ayer participaron, además, trabajadores de Tiempo que luchan contra el vaciamiento del diario y los medios del Grupo 23.
La denuncia por disparos de arma de fuego y lesiones está radicada en el Juzgado de instrucción Nº 2 a cargo del juez Manuel Gorostiaga y la Fiscalía Nº 44, a cargo de Pablo Recchini.
MÁS DISPAROS. En Mar del Plata también hubo tiros contra un local de la agrupación kirchnerista La Cámpora, aunque no se registraron heridos. La unidad básica recibió cinco escopetazos cerca de la 1 del pasado sábado. Desde la agrupación emparentaron la agresión con los ataques de grupos neonazis en la ciudad balnearia, que fueron repudiados desde La Cámpora.
Agresión a dirigentes de ATE mendocinos
Una patota atacó al secretario general de ATE en Mendoza, Roberto Macho, y otros manifestantes que protestaban en el Hipódromo de Godoy Cruz por los despidos en el casino de esa provincia. «Los han agredido salvajamente», denunció la diputada por el Partido Obrero en el Frente de Izquierda, Soledad Sosa.
«La Policía prácticamente dejó la zona liberada porque no lo evitó», agregó la legisladora. Y sostuvo que más allá de la denuncia policial expresarán una denuncia al poder político de la provincia, ya que los consideran responsables de los hechos ocurridos en el hipódromo.
Según explicó la propia Sosa, Roberto Macho presentó diversas heridas, pero también otras personas resultaron víctimas del ataque producido por una patota de unas cincuenta personas. Macho, junto a otros dirigentes de ATE, fue imputado por incumplir el protocolo represivo que intenta imponer el Gobierno provincial y también el nacional.
Aunque el oficialismo mendocino intentó presentar la situación como un choque entre los sindicalistas y el público, desde ATE negaron tajantemente esta versión y recharon las informaciones que, incluso, surgieron en algunos medios locales.